Los siete sacramentos de la Iglesia católica

 

Los Siete Sacramentos:

1. Bautismo

2. Confesion

3. Eucarsitia

4. Confirmacion

5. Matrimonio

6. Ordenes Sagradas

7. Uncion de los Enfermos

Cada sacramento nos proporciona gracia, la fuerza de Dios, durante un momento diferente en nuestra vida.

El bautismo, la Eucaristía y la Confirmación son los sacramentos que nos hacen formar parte de la familia de Dios. Juntos se les conoce como los sacramentos de iniciación. El bautismo nos hace hijos adoptivos de Dios.

La Santa Eucaristía nos alimenta y nos fortalece, ayudándonos a convertirnos en la persona que Dios nos creó para ser.

La confirmación es cuando Dios nos da más gracias, más dones, a través de su Espíritu Santo, para que podamos hacer el trabajo que Dios nos creó para hacer.

Las órdenes sagradas y el sacramento del matrimonio están destinados a fortalecernos a medida que elegimos un camino de vida que seguiremos el resto de nuestras vidas.

Las órdenes sagradas son solo para hombres. Es el Sacramento que reciben los hombres cuando se convierten en Sacerdotes. Como Sacerdote, son apartados para vivir una vida de servicio a cualquiera que Dios les envíe.

El sacramento del matrimonio es para hombres y mujeres que eligen no vivir más como una sola persona, sino que se unen entre sí en una unión que durará hasta que uno de ellos muera. La Gracia de este Sacramento ayuda a cada persona a entregarse totalmente a la otra en los buenos y malos momentos de la vida.

La penitencia (o reconciliación) y la unción de los enfermos son los sacramentos de la curación. La penitencia nos permite hacer las paces con Dios por cualquier mal que le hayamos hecho.

La Unción de los enfermos nos fortalece espiritualmente cuando lo necesitamos y nos puede fortalecer físicamente si estamos enfermos o heridos.